Un Objetivo, una Ilusión

 

Parece fácil, un objetivo una ilusión. Las metas que nos ponemos generan movimiento y por tanto acción. Pero sólo un objetivo propio funciona, lo que realmente decidimos libremente.

Debemos retomar la consciencia y la responsabilidad de nuestra vida.

Veo a mi alrededor personas que no tienen trabajo y las que lo tienen están quemadas y perdiendo vida día a día. Nos volvemos grises porque la sociedad ha dejado de tratar a las personas como tal.

No olvidemos que cada uno de nosotros somos responsables de la situación actual, somos parte de un todo y cada uno tenemos la responsabilidad de luchar por vivir y conseguir dejar a nuestros hijos un mundo mejor.

Hemos nacido para VIVIR, no para morir en vida.

¿Dónde están nuestros valores? Hemos olvidado lo que es que yo este para ti y tú para mí, compartir, nuestro coraje. ¿Qué está pasando?

El mundo es cíclico y toca cambiar para mejorar. Estoy cansada de oir que vivimos tiempos difíciles y se debe aguantar todo. No es así. Ser un avestruz no ayuda.

Si tú estás resistiendo para vivir es hora de que te plantees ¿por qué? ¿te merece realmente la pena? ¿quieres que tus hijos resistan o vivan?

La vida es corta y cada segundo que pasa no vuelve. ¿Hace cuanto no te planteas lo que quieres?  

Es bueno hacer un repaso de lo que esperas de la vida, si eres feliz o si puedes hacer algo para acercarte a serlo, si te merece la pena para ti y los tuyos.    

Amor, Ética, Respeto, Coraje, Sinceridad, Lealtad sobre todo a ti mismo, Cooperación, Libertad, Honestidad, Alegría…

¿Te suena? Sólo tienes que despertar tus valores si se han dormido.

Se feliz hoy, sonríe, trabaja honestamente y haz que el mundo a tu alrededor sea mejor.

Cada grano de arena cuenta. Todos somos uno.

 

Ojala te sirva.

Carmen Hidalgo.